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La evolución de la teoría cogniscitiva del aprendizaje

INTRODUCCIÓN

 

La psicología cognitiva es una escuela de la psicología que se encarga del estudio de la cognición, es decir los procesos mentales implicados en el conocimiento. Tiene como objeto de estudio los mecanismos básicos y profundos por los que se elabora el conocimiento, desde la percepción, la memoria y el aprendizaje, hasta la formación de conceptos y razonamiento lógico. Por cognitivo entendemos el acto de conocimiento, en sus acciones de almacenar, recuperar, reconocer, comprender, organizar y usar la información recibida a través de los sentidos.

 El desarrollo más emocionante en el campo de la psicología cognoscitiva no es una teoría o un descubrimiento experimental en particular, sino una tendencia general. Los psicólogos cognoscitivistas han demostrado un interés creciente en el estudio de las complejas tareas del mundo real y están logrando un avance importante en la comprensión de cómo realiza la gente sus tareas.

 Este trabajo tiene como finalidad el conocer la manera en que la teoría cognoscitivista ha evolucionado desde su origen a nuestros días, presentando cambios según la época y las dificultades que sus miembros presentaron.

 Estas teorías como muchas otras han aportado técnicas que pretenden comprender la forma en que el humano aprende los enseñado; de esta manera satisfaciendo la curiosidad del hombre que intenta darle una explicación lógica y científica a los actos de su vida diaria.

 

A.        Concepto

 

La psicología cognoscitiva es una de las adiciones más recientes a la investigación psicológica. Se desarrolló como un área separada de la disciplina desde los primeros años de la década de 1950 y 1960. El término comenzó a usarse con la publicación del libro Psicología cognoscitiva por Ulrich Neisser en 1967. Pero, el acercamiento cognoscitivo fue traído a la prominencia por el libro de Donald Broadbent Percepción y Comunicación en 1958. Desde ese momento, la metáfora dominante en el área ha sido el modelo de procesamiento de información de Broadbent.

 Los principales exponentes de la psicología cognoscitiva son Alan Baddeley, Frederic Bartlett, Donald Broadbent, Jerome Bruner, Hermann Ebbinghaus, George A. Miller, Ulrich Neisser, David Rumelhart, Herbert Simon, Endel Tulving, y Robert L. Solso. Piaget y Vygotsky

 

B.        Sus Orígenes

 

Los orígenes más remotos de la psicoterapia cognitiva provienen de la filosofía estoica (350 a.C al 180 d.C) y la filosofía religiosa oriental budista y taoísta. La filosofía estoica fundada por el griego Zenón consideraba indispensable la ciencia para dirigir la vida, a través del ejercicio de la virtud. Esta última era el bien supremo, pues su práctica llevaba a la felicidad. Para alcanzar esta meta debían de gobernarse los estados emocionales extremos (las pasiones) a través del autodominio. Estas consideraciones fueron defendidas en la ética estoica griega (Zenón de Citio, Crisipo y Epicteto) y la romana (Marco Aurelio, Séneca y Cicerón). Quizás fue Epicteto quién más desarrolló la idea de como se producían las pasiones y de como se podían dominar. En su obra “Enchiridon” afirma que los hombres se perturban más por la visión u opinión que tienen de los acontecimientos que por estos mismos. Por lo tanto, opiniones más correctas podían reemplazar a las más incorrectas y producir así un cambio emocional (básicamente la misma idea que reproduce A. Ellis veintiún siglos después).

 En Oriente Gautama (Buda) allá por el 566 a.C proclamaba sus principios de su religión atea: el dominio del sufrimiento físico y emocional a través del dominio de las pasiones humanas, que lleva a un estado de insensibilidad e indeterminación total, el Nirvana (desnudez, extinción). El budismo afirma que la realidad es construida por el pensamiento, por los juicios valorativos, que pueden ser pasionales y generar sufrimiento.

Podemos seguir rastreando el curso filosófico de concepciones que resaltaban el aspecto de la organización cognitiva de la experiencia humana, y el papel de la cognición en la emoción y conducta. Así, en los empiristas ingleses del siglo XVII (Hume, Locke, F. Bacon) se resaltan nociones como que las emociones derivan de las asociaciones de ideas, y que para lograr un nuevo conocimiento hay que librarse de los prejuicios, es decir de conceptos erróneos preestablecidos.

 En los siglos XVIII y XIX dentro de la corriente idealista alemana, autores que resaltan el papel de la cognición (significados, pensamientos) son principalmente Kant (1724-1804) y Vaihinger (1853-1933). Kant en su “Crítica de la razón pura” (1781) describe la naturaleza del conocimiento no como mero derivado de una capacidad innata humana (idea defendida por los racionalistas como Descartes), ni como simple producto de las asociaciones sensoriales (como defendían los empiristas ingleses). Él reúne los dos aspectos anteriores en una nueva síntesis que intenta resolver los problemas creados a la explicación de la génesis del conocimiento. Él argumenta que el conocimiento, por lo tanto los significados personales de la experiencia humana, son construidos por la mente humana. Según Walhsh, Kant introduce el concepto de esquema cognitivo: una construcción mental de la experiencia que refleja al mismo tiempo el mundo real de los objetos y hechos siempre cambiantes y la lógica subyacente de las categorías que la mente impone a la experiencia. Incluso el filósofo alemán, llega a describir la enfermedad mental como el resultado de no adecuar el “sentido privado”, de los significados racionales compartidos socialmente. Sin embargo será el neokantiano H. Vaihinger quien más desarrolle la idea de la realidad construida por los esquemas. Para este autor la conducta está guiada por metas y guiones ficticios (construcciones simbólicas personales), que tienen por finalidad asegurar la vida humana. Todas estas ideas tendrán una influencia decisiva sobre Alfred Adler, y a través de este sobre la futura y posterior psicoterapia cognitiva.

 Ya en el siglo XX la corriente fenomenológica (Husserl) y la existencial (Heiddeger) destacaran el papel de la experiencia subjetiva en el conocimiento y la existencia, resaltando el papel de la conciencia y los actos conscientes. Por otro lado B. Rusell (1873-1971) destaca en su obra “la conquista de la felicidad” (1930) el papel jugado por las creencias adquiridas en la primera infancia que se hacen inconscientes y a veces perturban a las personas en su vida mas adulta como exigencias irracionales, y como pueden ser sustituidas por creencias más racionales ayudando así al individuo a alcanzar sus metas (este autor ha tenido una influencia poderosa sobre el psicólogo A. Ellis). No hay que olvidar al filósofo español Ortega y Gasset (1883-1955) que en su obra “Ideas y creencias” (1940) y otras, desarrolla el tema del hombre como instalado en ideas y creencias en unas circunstancias históricas, desarrollando a través de ellas una perspectiva personal de sus circunstancias y viéndose esa perspectiva a su vez afectada por esas circunstancias.

      Desde el ámbito de la lingüística, a finales de los años sesenta, Noam Chomsky le da un giro radical a la lingüística dominada en su época por planteamientos conductistas de estímulo-respuesta. Desde su planteamiento de la gramática generativa-transformativa desarrolla la idea de que el lenguaje humano posee un potencial creativo que le permite a partir de unos elementos lingüísticos finitos el producir y entender un número prácticamente ilimitado de oraciones. Según Chomsky los humanos poseen un sistema innato de reglas del lenguaje, los universales lingüísticos, que conforman la estructura profunda del lenguaje, y que mediante una serie de transformaciones producen la estructura superficial del lenguaje, es decir las oraciones. Este autor considera la lingüística como una parte de la psicología cognitiva (Chomsky, 1956,1957 y 1965).

 

C.        Etapas en el desarrollo de la psicología cognitiva

 

La siguiente descripción histórica está basada en el libro de Francisco Varela: De cuerpo presente. Las ciencias cognitivas y la experiencia humana, en que se realiza una síntesis del pensamiento cognitivo desde sus años de formación, distinguiendo etapas de desarrollo en que han primado diferentes metáforas o modelos explicativos de la mente humana. La última de estas etapas, el llamado Enfoque enactivo, es la postura que defiende Francisco Varela y hermanos.

 

1. Hipótesis cognitivista

 Desde esta hipótesis, la cognición está definida como la manipulación de símbolos a través de determinadas reglas. El sistema interactúa con los símbolos, pero no con su significado, y el sistema (mente) funcionaría correctamente cuando los símbolos representan en forma adecuada la realidad externa, o algún aspecto de ésta, y el procesamiento de la información dentro del sistema (computación simbólica) lleva a una solución adecuada del problema que se ha presentado.

 Esta es la hipótesis considerada todavía por muchos como el principal exponente del planteamiento cognitivista, y el paradigma del procesamiento de información y la metáfora del ordenador, es aún con el que más se identifica a la psicología cognitiva.

 

2. Hipótesis conexionista

 La hipótesis cognitivista implicaba una forma de cognición secuencial y localizada. Sin embargo, estos planteamientos no concuerdan con los resultados más recientes de las investigaciones neurocientíficas, en que son más aceptados modelos cerebrales en que las operaciones son distribuidas y se generan a partir de interconexiones masivas que cambian producto de la experiencia. Sin embargo, las redes neurales tienen propiedades formales casi desconocidas, pues aunque no obstante imiten procedimientos neuronales, no necesariamente se corresponden con un estricto nivel empírico adecuado. Muchos de estos trabajos han sido criticados por su implausibilidad biológica.

 Debido a estas discrepancias, y al rescate de ideas sobre sistemas autoorganizados que estuvieron presentes en la etapa formacional de esta rama de la psicología, pero que fueron ocultados por la hipótesis cognitivista, surge la necesidad de una nueva conceptualización de la mente humana.

 

D.        La evolución de las teorías cognoscitivas del aprendizaje

 

Al inicio de la Segunda Guerra Mundial, comenzó una “revolución cognoscitivista” que modificó en forma radical la manera de aproximarse al aprendizaje de los estudiantes. Antes de la Segunda Guerra Mundial, el estudio de la psicología cognoscitiva estaba restringido. John B. Watson, el psicólogo estadounidense, criticó a los que estudiaban los procesos del pensamiento al afirmar que es imposible estudiar cómo piensan las personas pues nadie tiene acceso al inte­rior de sus cabezas, y que, a lo mucho puede observarse su comportamiento.

 El razonamiento de Watson parecía tener sentido para muchos, por lo cual de 1914 hasta la Segunda Guerra Mundial, el enfoque de la psicología estadounidense era predominantemente conductual más que cognoscitivo. Sin embargo, la Segunda Guerra Mun­dial trajo consigo la necesidad de que la gente realizara muchas destrezas con mayor rapidez y eficiencia. Por ejemplo, se necesitaban muchos pilotos y técnicos de radar diestros pues los errores de los pilotos estaban costando muchas vidas y la destrucción de aviones que valían millones de dólares. En su búsqueda de ayuda para resolver esos problemas, el gobierno de Estados Unidos recurrió a los psicólogos, los cua­les se dieron a la tarea de estudiar el desempeño humano y desarrollar me­jores programas de entrenamiento. Este trabajo y la confianza del gobierno en dichos programas hicieron que la gente aceptara por primera vez la posi­bilidad de la investigación científica del desempeño humano, la toma de deja cisiones y el procesamiento de la información. El éxito de esos estudios mi­litares llevó a los psicólogos a pensar en estructuras y procesos mentales, lo cual dio lugar al inicio de la teoría cognoscitiva del aprendizaje. El movimiento cognoscitivista continuó durante la década de los cincuenta cuando algunos psicólogos desafiaron la explicación conductista de Skinner del de­sarrollo del lenguaje.

 Los psicólogos conductistas creían que la conducta humana resulta de las res­puestas a los estímulos del ambiente. Sin embargo, Noam Chomsky (1959) sostenía que la explicación conductista del lenguaje no podía dar cuenta de por qué los humanos vocalizan ciertas emisiones o frases en momentos particulares. Afirmaba que para el uso del lenguaje son necesarios “procesos men­tales”. Específicamente, Chomsky propuso que la estructura del lenguaje es demasiado compleja para explicarse en términos conductistas. Muchos lin­güistas estuvieron de acuerdo con Chomsky, quien argumentó que los seres humanos tienen la capacidad innata para dominar el lenguaje, idea contra­puesta al énfasis de los conductistas en el aprendizaje. La crítica de Chomsky al conductismo tuvo grandes repercusiones y dio lugar a una estrecha relación entre psicólogos cognoscitivistas, lingüistas y la percepción del lenguaje.

Otros factores contribuyeron a la revolución cognoscitivista, entre elle la importante investigación de la memoria, la cual empezó en la década de los cincuenta. Los psicólogos cognoscitivistas comenzaron a investigar y especular sobre diferentes tipos de memoria, a explorar su organización y a proponer modelos de memoria.

Otras contribuciones iniciales a la teoría cognoscitivista del aprendizaje incluyeron la teoría de Piaget del desarrollo cognoscitivo y la teoría de Bruner del aprendizaje por descubrimiento.

 

1. La aproximación del aprendizaje por descubrimiento

Es posible enseñar a los estudiantes las destrezas que necesitan para solu­cionar problemas de manera más eficaz, y los maestros pueden a su vez usar procedimientos bien definidos para lograr que sus alumnos desarro­llen mejores estrategias de aprendizaje y de pensamiento. Al poner el acento en la indagación, en un proceso al que denominó aprendizaje por descubrimiento, J. S. Bruner (1956, 1966, 1971, 1978, 1982) confirmó la sabiduría del antiguo proverbio chino mencionado. A diferencia de las disciplinas mentalistas y de los conductistas, Bruner pro­puso que al ayudar a los estudiantes a descubrir el contexto y la informa­ción en el marco de un campo de estudio, los maestros pueden ayudarlos a recordar y aplicar lo aprendido. Piaget y Bruner afirmaban que lo que aprenden los estudiantes por sí mismos es más significativo que lo aprendi­do como resultado de lo hecho por otros. El método del descubrimiento tiene raíces en la teoría de Piaget la cual afirma que los estudiantes que des­cubren la información no dependen tanto de la motivación que reciben del maestro como los aprendices en clases dominadas por el profesor.

Bruner alentó a los profesores a enseñar a sus alumnos cómo buscar soluciones a los problemas académicos. Esa forma de enseñanza ayudaría a los estudiantes a desarrollar habilidades de solución de problemas, a mejo­rar su confianza en sus habilidades de aprendizaje y a prepararse para en­frentar los problemas de la vida.

 

2. Aprendizaje por descubrimiento Guiado

 En el aprendizaje por descubrimiento guiado, el maestro dirige cada paso de la solución de problemas. Esta técnica se desarrolló en la década de los setenta. Por otro lado, en el descubrimiento abierto, los problemas se resuelven sin la supervisión cerca­na del profesor. La solución de problemas se adapta al aprendizaje por des­cubrimiento guiado pues permite que los estudiantes desarrollen estrate­gias de aprendizaje. Ausubel, Novak y Hanesian (1978) criticaron el méto­do de descubrimiento abierto y propusieron que el aprendizaje por descu­brimiento “guiado”, en el cual los profesores explican los materiales que deben aprenderse, es más eficaz. El aprendizaje por descubrimiento guiado abrió la puerta a las visiones cognoscitivas contemporáneas del aprendizaje.

 

E.         El Contexto de la Psicología Cognitiva

 

La psicología cognitiva se preocupa del estudio de procesos tales como lenguaje, percepción, memoria, razonamiento y resolución de problema. Ella concibe al sujeto como un procesador activo de los estímulos. Es este procesamiento, y no los estímulos en forma directa, lo que determina nuestro comportamiento. Bajo esta perspectiva, para Jean Piaget, los niños construyen activamente su mundo al interactuar con él. Por lo anterior, este autor pone énfasis en el rol de la acción en el proceso de aprendizaje. La teoría del desarrollo cognitivo de Jean Piaget es una de las más importantes. Divide el desarrollo cognitivo en etapas caracterizadas por la posesión de estructuras lógicas cualitativamente diferentes, que dan cuenta de ciertas capacidades e imponen determinadas restricciones a los niños. Con todo, la noción piagetiana del desarrollo cognitivo en términos de estructuras lógicas progresivamente más complejas ha recibido múltiples críticas por parte de otros teóricos cognitivos, en especial de los teóricos provenientes de la corriente de procesamiento de la información.

Los teóricos del procesamiento de la información critican la teoría del desarrollo de Piaget, planteando que las etapas se diferencian no cualitativamente, sino por capacidades crecientes de procesamiento y memoria. Bruner, por ejemplo, rechaza explícitamente la noción de etapas desarrollistas, sin embargo, sostiene que diferentes modos de procesar y representar la información son enfatizados durante diferentes períodos de la vida del niño. Él plantea que, durante los primeros años, la función importante es la manipulación física: saber es principalmente saber cómo hacer, y hay una mínima reflexión. Durante el segundo período que alcanza un punto más alto entre los 5 y 7 años, el énfasis se desvía hacia la reflexión y el individuo, se hace más capaz de representar aspectos internos del ambiente. Durante el tercer período, que coincide en general con la adolescencia, el pensamiento se hace cada vez más abstracto y dependiente del lenguaje. El individuo adquiere una habilidad para tratar tanto con proposiciones como con objetos. Es decir, según Bruner los seres humanos han desarrollado tres sistemas paralelos para procesar y representar información. Un sistema opera a través de la manipulación y la acción, otro a través de la organización perceptual y la imaginación y un tercero a través del instrumento simbólico. En distintos períodos del desarrollo, se le otorga distinto énfasis a diferentes modos de representación. En este sentido, para Jerome Bruner, el desarrollo intelectual se caracteriza por una creciente independencia de los estímulos externos; una creciente capacidad para comunicarse con otros y con el mundo mediante herramientas simbólicas y por una creciente capacidad para atender a varios estímulos al mismo tiempo y para atender a exigencias múltiples. El aprendizaje por descubrimiento es la capacidad de reorganizar los datos ya obtenidos de maneras novedosas, de manera que permiten descubrimientos nuevos. Esto queda expresado en el principio de este autor: Todo conocimiento real es aprendido por uno mismo. Bruner propone una teoría de la instrucción que considera cuatro aspectos fundamentales: la motivación a aprender, la estructura del conocimiento a aprender, la estructura o aprendizajes previos del individuo, y el refuerzo al aprendizaje.

Otros teóricos del procesamiento de la información describen el desarrollo cognitivo en términos de capacidades crecientes en procesos básicos tales como la memoria, la atención, el almacenamiento y la recuperación de la información.  Detrás de estas teorías está el Aprendizaje mecánico. Este se entiende como la incorporación de nueva información en la estructura cognoscitiva del que aprende sin que establezca ninguna relación con los conceptos (o proposiciones) ya existentes en ella, en cuyo caso, dicha información es almacenada de manera arbitraria sin que haya interacción con aquella. A diferencia de lo anterior, David Ausubel propuso el término Aprendizaje significativo para designar el proceso a través del cual la información nueva se relaciona con un aspecto relevante de la estructura del conocimiento del individuo. A la estructura de conocimiento previo que recibe los nuevos conocimientos, Ausubel da el nombre de concepto integrador. El aprendizaje significativo se produce por medio de un proceso llamado Asimilación. En este proceso, tanto la estructura que recibe el nuevo conocimiento, como este nuevo conocimiento en sí, resultan alterados, dando origen a una nueva estructura de conocimiento. Así, la organización del contenido programático permite aumentar la probabilidad de que se produzca un aprendizaje significativo. Para ello, se debe comenzar por conceptos básicos que permitan integrar los conceptos que vendrán en forma posterior.

 

1. Aprendizaje y Desarrollo en Vygotsky

 Los problemas con los que nos encontramos en el análisis psicológico de la enseñanza no pueden resolverse de modo correcto, ni siquiera formularse, sin situar la relación entre aprendizaje y desarrollo en niños de edad escolar. A partir de esta proposición, L.S. Vygotsky, psicólogo soviético, que trabajó hacia mediados de este siglo, propuso una aproximación completamente diferente frente a la relación existente entre aprendizaje y desarrollo, criticando la posición comúnmente aceptada, según la cual el aprendizaje debería equipararse al nivel evolutivo del niño para ser efectivo. Quienes sostienen esta posición consideran, por ejemplo, que la enseñanza de la lectura, escritura y aritmética debe iniciarse en una etapa determinada.

 Para Vygotsky, “todas las concepciones corrientes de la relación entre desarrollo y aprendizaje en los niños pueden reducirse esencialmente a tres posiciones teóricas importantes. La primera de ellas se centra en la suposición de que los procesos del desarrollo del niño son independientes del aprendizaje. Este último se considera como un proceso puramente externo que no está complicado de modo activo en el desarrollo. Simplemente utiliza los logros del desarrollo en lugar de proporcionar un incentivo para modificar el curso del mismo…esta aproximación se basa en la premisa de que el aprendizaje va siempre a remolque del desarrollo, y que el desarrollo, avanza más rápido que el aprendizaje, se excluye la noción de que el aprendizaje pueda desempeñar un papel en el curso del desarrollo o maduración de aquellas funciones activadas a lo largo del aprendizaje. El desarrollo o maduración se considera como una condición previa del aprendizaje, pero nunca como un resultado del mismo”

  ”La segunda posición teórica más importante es que el aprendizaje es desarrollo el desarrollo se considera como el dominio de los reflejos condicionados; esto es, el proceso de aprendizaje está completa e inseparablemente unido al proceso desarrollo el desarrollo como la elaboración y sustitución de las respuestas innatas el desarrollo se reduce básicamente a la acumulación de todas las respuestas posibles. Cualquier respuesta adquirida se considera o bien un sustituto o una forma más compleja de la respuesta innata aprendizaje y desarrollo coinciden en todos los puntos, del mismo modo que dos figuras geométricas idénticas coinciden cuando se superponen”.

 “La tercera posición teórica según la cual el desarrollo se basa en dos pro esos inherentemente distintos pero relacionados entre sí, que se influyen mutuamente. Por un lado está la maduración, que depende directamente del desarrollo del sistema nervioso; por el otro, el aprendizaje, que, a su vez, es también un proceso evolutivo el proceso de maduración prepara y posibilita un proceso específico de aprendizaje el proceso de aprendizaje estimula y hace avanzar el proceso de maduración.” Sin embargo, observa Vygotsky, no podemos limitarnos simplemente a determinar los niveles evolutivos si queremos descubrir las relaciones reales del desarrollo con el aprendizaje.

 

F.         Los logros de la psicología cognitiva

 

Alrededor de 1950, en la segunda mitad del siglo XX surge con gran fuerza la Psicología cognitiva. Esto implica el estudio de la mente que era rechazado por los conductistas por inobservable. La Psicología cognitiva siempre trata de conocer en detalle los procesos mentales. Esto ha sido lo que la ha distinguido del conductismo. Aunque el conductismo representó una tendencia claramente dominante en la primera mitad del siglo XX, muchos psicólogos demostraban ciertas reservas. Por ejemplo, Tolman consideraba imposible explicar el aprendizaje de un animal únicamente por la memorización de una serie de acciones y creía que era necesario referirse a un mapa cognitivo, especie de plan mental que el animal utilizaba para guiar las acciones que eran necesarias para resolver el problema. Todas las diferentes críticas al conductismo extremo llevaron así al surgimiento (en los años 50 y 60) de lo que se suele llamar la revolución cognitiva. Aunque el movimiento cognitivista sigue estudiando el ser humano a través de comportamientos observables, a menudo, usa condiciones experimentales muy bien controladas y hace uso frecuente de los modelos y técnicas matemáticas sofisticadas, análisis multivariados, funciones exponenciales, etc. Es decir, tienen muy en

Existen varias corrientes de pensamiento que han contribuido al surgimiento de la Psicología Cognitiva. Por ejemplo, los análisis del lenguaje realizados por pensadores tan diferentes como Noam Chomsky (1957), Jean Piaget (1926), Lev Vigotsky (1962) y Jerome Brunner (1983) pueden incluirse todos en el pensamiento cognitivista. Para Chomsky el lenguaje o cualquier otra capacidad cognitiva surge de una propiedad universal de los individuos que es innata. El niño con su conocimiento innato de los universales lingüísticos deriva a través del lenguaje hablado un sistema de reglas gramaticales de la lengua particular a la cual está expuesto.

Chomsky, en 1957, provocó una revolución en la lingüística insistiendo en tres puntos fundamentales:

 

La teoría de Piaget, como la de Chomsky, es organísmica, es decir, resalta la universalidad de la cognición y el contexto es considerado relativamente poco importante. Su teoría del lenguaje está integrada en su teoría general del desarrollo cognitivo que es constructivista. Piaget, así como el lingüista suizo Saussure y el antropólogo Levi-Strauss, era estructuralista. Su preocupación por la epistemología le hizo estudiar el desarrollo mental de los niños con el fin de aclarar los fundamentos del conocimiento. Los puntos básicos de la teoría del lenguaje de Vigotsky son: que el habla tiene un origen social y que el lenguaje precede al pensamiento racional e influye en la naturaleza del mismo. Vigotsky propuso que las funciones superiores del hombre, lenguaje y pensamiento, se desarrollaban primero en la interacción del niño con otra persona y devendrían intrapersonales a medida que el niño fuera conciente de su significación. Jerome Brunner, en cambio, sugirió que el niño aprende a usar el lenguaje, es decir acentuó el aspecto comunicativo del desarrollo del lenguaje más que su naturaleza estructural. Parte del aprendizaje de la comunicación implica aprender lo que las palabras y las frases significan. También han tenido importancia para el surgimiento de la Psicología Cognitiva algunos aportes de la psicología de la Gestalt. Los psicólogos Wertheimer, Kohler, Koffka y Lewin se oponían al asociacionismo filosófico, que consideraba que la vida mental consistía solo en asociaciones de ideas, y determinaron la importancia de las relaciones estructurales de la percepción y defendieron la comprensión súbita de un problema al captar la estructura subyacente.

La Psicología Cognitiva se define en general como una ciencia objetiva de la mente concebida como un sistema de conocimiento. Se habla a veces de Psicología Cognitiva en un sentido restricto, que se apoya en la metáfora mente computadora, es decir, que utiliza los conceptos y procesos relacionados con las computadoras. Los antecedentes científicos de la Psicología Cognitiva (o ciencia cognitiva como muchos dicen actualmente) hay que buscarlos en los grandes avances tecnológicos producidos al terminar la Segunda Guerra Mundial.

 

CONCLUSIÓN

 

 

La psicología cognoscitivista es la ciencia que estudia los procesos cognoscitivos es la psicología cognitiva. Y cuando hablamos de procesos cognoscitivos nos referimos a la percepción, memoria, atención, lenguaje, razonamiento, y resolución de problemas. Esta ciencia tiene sus raíces en la psicología post-filosófica o moderna, en un inicio en la psicología introspectiva del primer laboratorio de psicología, creado por Wilhelm Wundt en 1879 en Leipzig, Alemania. Y Sin embargo, surge como corriente psicológica en los años 50 y 60 como reacción al conductismo. El estudio del desarrollo cognitivo representa un gran aporte a la educación, dado que permite conocer las capacidades y restricciones de los niños en cada edad; y por ende, graduar la instrucción a las capacidades cognitivas del alumno, haciendo más efectivo el proceso de aprendizaje. De este modo, dichos factores han conducido a que sea posible planear las situaciones de instrucción con mayor eficacia, tanto en cuanto a la organización de los contenidos programáticos como en cuanto a tomar en cuenta las características del sujeto que aprende.

 La psicología cognitiva da al estudiante un rol activo en el proceso de aprendizaje. Gracias a esto, procesos tales como la motivación, la atención y el conocimiento previo del sujeto pueden ser manipulados para lograr un aprendizaje más exitoso. Además, se logró desviar la atención desde el aprendizaje memorístico y mecánico, hacia el significado de los aprendizajes para el sujeto, y la forma en que éste los entiende y estructura.

 La psicología cognitiva aplicada a la educación se ha preocupado principalmente de los procesos de aprendizaje que tienen lugar en cualquier situación de instrucción, incluida la sala de clases. Para el cognitivismo son importantes factores tales como los conocimientos previos, el aprendizaje significativo, el rol activo del sujeto como constructor de su conocimiento y el desarrollo y estimulación de estrategias cognitivas y metacognitivas. La psicología cognitiva, contrariamente a lo que comúnmente se suele crear no se originó en la década de los años sesenta, sino mucho antes como disciplina de la psicología experimental y de la psicología evolutiva.

 

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Citar este texto en formato APA: _______. (2012). WEBSCOLAR. La evolución de la teoría cogniscitiva del aprendizaje. https://www.webscolar.com/la-evolucion-de-la-teoria-cogniscitiva-del-aprendizaje. Fecha de consulta: 22 de diciembre de 2024.

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