Webscolar

Los materiales didácticos y la acción educativa

  1. Relación currículo – materiales y medios didácticos

Entendiéndose al currículo como la organización estructural del conjunto de contenidos, experiencias y actividades programadas, se requiere entre otras para su optimo desarrollo, una serie de sujetos y elementos y entre los otros a los contenidos, los métodos y los medios y los materiales didácticos, por lo que se puede afirmar que estos realizan una función específica interrelacionándose con los otros elementos en las fases de la motivación , en la adquisición de conocimientos ,habilidades, destrezas y en la comprobación de los aprendizajes.

El docente es quien, utilizando la estructura curricular o el proyecto curricular de centro educativo, elige las capacidades y actitudes que desarrollarán los niños a través de un proyecto, unidad o módulo de aprendizaje. Por lo tanto es él quien identifica y elige los materiales que facilitarán el logro de estos aprendizajes. Por eso se dice que los materiales educativos “concretizan u objetivan” el currículo, pues selección, estructuración, organización y uso se orientan hacia los aprendizajes básicos de los estudiantes contemplados en el currículo.

  1. Los programas curriculares y los materiales educativos

Muchas veces los materiales educativos no están acorde con los programas curriculares, estos materiales no logran la finalidad de los objetivos de aprendizaje, siendo inútiles para lograr las metas del educador en el aula.

Estos materiales educativos, ya sean impresos, visuales o de otra tecnología, no deben ser escogidos por su versatilidad, ni por su fácil utilización y así desligar al educador en su función de tutor.

El educador en todo momento debe ser guía, facilitador y tutor de la clase, ya se con materiales educativos o sin ellos.

Los materiales deben servir de apoyo en el desarrollo de las unidades de aprendizaje por experiencia programada. Es decir, presentan los contenidos previstos y contribuir al logro de los objetivos; además está de acuerdo con la metodología de enseñanza-aprendizaje elegirá por el docente.

Es importante que no exista contradicción entre el material que se emplea y la programación curricular en los objetivos, en los contenidos y en la metodología por ejemplo si se ha decidido aplicar el método global de la lectura por razones debidamente fundamentales, no se empleará un libro de la lectura basado en el método silábico. El docente debe tener claro qué va a enseñar que van a aprender los estudiantes para utilizar el medio y material más pertinente.

  1. Clasificaciones de los materiales didácticos

A partir de la consideración de la plataforma tecnológica en la que se sustenten, los medios didácticos, y por ende los recursos educativos en general, se suelen clasificar en tres grandes grupos, cada uno de los cuales incluye diversos subgrupos:

  1. Funciones

Según como se utilicen en los procesos de enseñanza y aprendizaje, los medios didácticos y los recursos educativos en general pueden realizar diversas funciones; entre ellas destacamos como más habituales las siguientes:

  1. Selección

Los materiales curriculares son instrumentos que ayudan a los profesores en la toma de decisiones que tienen que realizar respecto al proceso de enseñanza-aprendizaje; asimismo, facilitar la formación permanente del profesorado, que, siendo una necesidad inherente a su función pedagógica, cobra una especial relevancia en unos momentos en que se ha puesto de manifiesto la necesidad de su autonomía profesional.

Para que un material didáctico resulte eficaz en el logro de unos aprendizajes, no basta con que se trate de un “buen material”, ni tampoco es necesario que sea un material de última tecnología. Cuando seleccionamos recursos educativos para utilizar en nuestra labor docente, debemos tomar en cuenta las siguientes características:

Así, la selección de los materiales a utilizar con los estudiantes siempre se realizará contextualizada en el marco del diseño de una intervención educativa concreta, considerando todos estos aspectos y teniendo en cuenta los elementos curriculares particulares que inciden. La cuidadosa revisión de las posibles formas de utilización del material permitirá diseñar actividades de aprendizaje y metodologías didácticas eficientes que aseguren la eficacia en el logro de los aprendizajes previstos.

Además según Méndez hay que tener en cuenta los siguientes factores para su selección:

  1. Evaluación

La evaluación se entiende como una actividad básicamente valorativa e investigadora y, por tanto, facilitadora del cambio y la mejora educativa. Desde esta concepción, la evaluación afecta no solo a los procesos de aprendizaje de los alumnos, sino también a los procesos de enseñanza y a los PC en los que esos procesos se inscriben.

Es en este contexto en el que la evaluación de los recursos materiales cobra sentido. Habrá que responder a las preguntas ¿sirvieron los recursos para los objetivos que pretendíamos?, ¿mejoraron el proceso?, ¿introdujeron perturbaciones?, ¿de qué tipo? Estas interrogantes están relacionadas con los criterios que hemos establecido en lo que se refiere a su selección y utilización.

En cualquier caso, los criterios que se utilicen deben estar de acuerdo con la intencionalidad de la evaluación y con los destinatarios de la misma. Por otra parte, cuando consideramos la evaluación de los medios didácticos, uno de los criterios que siempre suele estar presente es el de la eficacia didáctica, Es decir, su funcionalidad como medio facilitador de aprendizajes.

Como la eficacia didáctica al utilizar estos materiales depende básicamente de dos factores, las características de los materiales y la forma en la que se han utilizado con los estudiantes, suelen considerarse dos tipos de evaluación:

En cualquier caso, la evaluación suele hacerse a partir de la consideración de unos criterios de calidad que se concretan en unos indicadores que se pueden identificar en mayor o menor medida en los materiales que se evalúan. Los resultados de la evaluación se suelen recoger en unas plantillas “ad hoc” (más o menos extensas según el objeto y destinatarios de la evaluación) que incluyen diversos apartados: identificación del producto, valoración de acuerdo con los indicadores, evaluación global y comentarios.

  1. El último uso

Siendo este último uso menos académico, se utiliza como sinónimo del correcto uso de los recursos o a veces para referirse al no despilfarro o al ahorro de los mismos (“hacer economía”).

Citar este texto en formato APA: _______. (2013). WEBSCOLAR. Los materiales didácticos y la acción educativa. https://www.webscolar.com/los-materiales-didacticos-y-la-accion-educativa. Fecha de consulta: 24 de noviembre de 2024.

Salir de la versión móvil