FUNDAMENTOS CONCEPTUALES
Del grabado rupestre al ordenador
La historia de la tecnología en general, y de los medios de información y comunicación en particular, está íntimamente ligada a la historia del ser humano como sujeto civilizado e inteligente. Sin ellas todavía nos encontraríamos en un estadio prehistórico, similar al de los primeros homínidos de hace varios miles de años. Muchos autores afirman incluso que el homo sapiens es un homo tenologicus en el sentido de que sin artefactos e instrumentos éste no hubiera alcanzado el grado de dominio que actualmente posee sobre la naturaleza.
Los medios y tecnologías de la información y comunicación, es decir, aquellas que permiten la expresión de nuestras ideas y sentimientos así como el intercambio de información independientemente del tiempo y del espacio han sido, y continúan siendo, el motor o catalizador de los cambios culturales y sociales.
Las primeras huellas: iconos en las piedras
El primer gran hito vinculado con la necesidad de expresión del pensamiento del ser humano fueron los grabados realizados sobre las paredes de cuevas, en grandes piedras o en huesos de animales por las primeras poblaciones de homo sapiens hace más de 20.000 años. Las pinturas de animales de Lascaux en Francia, los bisontes de las cuevas de Altamira en España, los grabados saharianos de Tassili en el norte de África, … son algunos de los vestigios más destacados en este intento de dejar huella o reflejo del pensamiento humano en un soporte físico distinto al de su mente. Los iconos grabados en las piedras (en forma de espirales, laberintos, figuras humanas o de animales) fueron las primeras manifestaciones no orales de comunicación. Este fenómeno nos indica que el homo sapiens necesitaba trascenderse, dejar constancia y permanencia de sus ideas y emociones. Desconocemos los motivos y significados de dichos iconos, aunque es probable que tuvieran connotaciones mágicas y/o religiosas.
La escritura manuscrita. El pensamiento transformado en símbolos
La madurez expresiva y cultural de la civilización humana no se alcanza hasta la invención de la escritura. La creación de un conjunto de símbolos que combinados bajo ciertas reglas produjeran significado fue, quizás, el hito cultural de mayor relevancia histórica. Los primeros indicios de la escritura se remontan a 2.000-3.000 años antes de Cristo. El origen de la escritura se debe a la civilización mesopotánica desarrollada en la cuenca de los ríos Tigris y Eufrates. Una de las primeras evidencias que conocemos de un grabado escrito es el código de Hammurabi del segundo milenio anterior a nuestra era.
El dominio de la tecnología de la escritura, es decir, de la capacidad de codificar el pensamiento en un sistema de símbolos textuales, fue durante muchos siglos una habilidad reservada a una minoría de la población. El aprendizaje de la lectura (decodificación) y de la escritura (codificación) es un proceso difícil, largo y complejo. Por ello estaba reservado a pequeños grupos fundamentalmente de naturaleza religiosa. Ese conocimiento pertenecía a la esfera de los misterios de la vida, a los saberes ocultos, a la verdad revelada.
Los libros y textos impresos. La democratización del conocimiento
A finales del siglo XV se darán las condiciones necesarias para que un determinado invento tenga el desarrollo e impacto sociocultural que no hubiera logrado en una época anterior. La imprenta, es decir, la posibilidad de reproducir mecánicamente el mismo texto en un número casi ilimitado de ejemplares y en consecuencia de difundirlo a gran escala entre muchas personas, encontró su caldo de cultivo en la Europa Central de esa época. El renacimiento desarrolló las bases de la que puede denominarse como “cultura impresa”, es decir, de la cultura basada en la lectura individual de un texto reproducido en caracteres impresos con la intencionalidad de comprender sus mensajes. Esta tecnología implantó un determinado modo de organizar la información y el conocimiento tanto en su almacenamiento como en su decodificación por parte de los lectores.
La cultura audiovisual. El placer de los sentidos
El final del siglo XIX y el comienzo del XX fue una época fecunda de descubrimientos y creaciones tecnológicas: el telégrafo, la radio, la fotografía, el fonógrafo, la cinematografía, … Por vez primera en la historia el ser humano era capaz de manipular los átomos de la energía para transformarlos en datos con significado. De este modo la información pudo independizarse del soporte físico o material que la vehiculizaba (es decir, del papel, del papiro, del barro, de la piedra). Por una parte se inventaron los medios basados en la transmisión y manipulación de ondas como la radio, el teléfono, o la televisión. Por otra parte se crearon nuevos soportes físicos que se basan en la transformación de la materia mediante procesos químicos como las películas, las placas fotográficas o las cintas magnéticas.
Estos avances en el hardware tecnológico implicaron nuevas formas de representación de la información que podían imitar o asemejarse de forma fiel a la realidad utilizando el sonido y la imagen. La innovación cultural que representaron estas tecnologías consistió en que la información no se codificaba en símbolos de naturaleza abstracta, como es la escritura, sino mediante signos similares a los que perciben nuestros sentidos en la realidad.
El uso e impacto pedagógico de los medios audiovisuales en los procesos educativos, hasta la fecha, ha sido menor de lo que cabría esperar. Los costes económicos de estos medios, la dificultad de producir y elaborar materiales audiovisuales por parte de los docentes y alumnos, la falta de formación adecuada por parte del profesorado, junto con diversos tipos de resistencias ante la presencia de la cultura audiovisual en las escuelas no han facilitado que los medios audiovisuales sean algo habitual en las aulas. Ello está provocando desajustes culturales entre las experiencias audiovisuales, cada vez mayores, que los niños y jóvenes obtienen en su vida cotidiana, y las formas y recursos didácticos utilizados en las escuelas que en su mayoría son de naturaleza impresa.
La digitalización de la información. Hacia los entornos virtuales
El siglo XX, además de ser la centuria de la cultura audiovisual, ha sido el comienzo de la era digital. A mediados de siglo se construyeron las primeras grandes máquinas procesadoras de información codificada en un sistema binario de datos. La creación del ENIAC en 1946 es considerado como el hito que abrió la evolución tecnológica de la informática. Era una máquina enorme (ocupaba casi 1.500 m2) que funcionaba con válvulas de vacío. El desarrollo del transistor en los años 50 permitió reducir el tamaño y velocidad de estas máquinas. Sin embargo hasta la aparición de los circuitos integrados en los años sesenta, que permitieron la miniaturización de los componentes electrónicos realmente no se logró disponer de máquinas que pudieran ser etiquetadas como computadoras útiles. Los chips actuales de silicio han transformado a las computadoras en unos objetos pequeños, poderosos y populares que han penetrado no sólo en las grandes instituciones y organizaciones, sino también en los hogares.
Concepto y tipos de medios de enseñanza
Algunos autores han definido los medios de enseñanza de la siguiente forma:
Renato May: cualquier instrumento u objeto que sirva como canal para transmitir entre un interactuante y otros. Estos pueden ser el medio visual: transparencias, artículos periodísticos, un papelógrafo, medios auditivos y el medio audiovisual: televisión, computadoras.
Robert E. Kepler: todas aquellas experiencias y elementos que se utilizan en la enseñanza y que hacen uso de la visión y/o el oído.
Margarita Castañeda: Es un objeto, un recurso instruccional que proporciona al alumno una experiencia indirecta de la realidad y que implican tanto la organización didáctica del mensaje que se decía comunicar, como el equipo técnico necesario para materializar ése mensaje.
La clasificación e identificación de los mismos también puede varias en función del criterio utilizada para su categorización (el agente educativo al que se destina, la materia o asignatura, el nivel o ámbito educativo…). En el cuadro siguiente se ofrece una propuesta clasificatoria de los distintos tipos de medios y materiales según el soporte físico y sistema simbólico predominante en el mismo. En el cuadro se incluye una pequeña descripción de las características de cada tipo de medio y se ejemplifican algunos materiales representativos de cada tipología.
Clasificación de los tipos de medios y materiales en el cuadro a continuación:
TIPOS | MODALIDAD
SIMBOLICA |
MEDIOS Y MATERIALES INCLUIDOS |
Medios manipulativos | Naturaleza enactiva | Aros, pelotas, cuerdas |
Medios textuales/impresos | Códigos verbales como sistema simbólico predominante | Guías didácticas. Libros de textos |
Medios audiovisuales | Codifican sus mensajes representaciones icónicas | Proyector diapositivas. DVD. TV. |
Medios auditivos | La música, la palabra, sonidos | Casete. Tocadiscos. Radio |
Medios informáticos | Desarrollan, utilizan, combinan códigos visuales, icónicos fijos o en movimiento | Ordenador
CD Rom Telemática CD-I |
Medios, cognición y aprendizaje
Según Salomon, los factores que inciden en la determinación de la cantidad de actividad mental requerida a un alumno en una situación de aprendizaje vendría dada por:
- diferencias individuales de los sujetos, tanto en su desarrollo cognitivo como en el dominio de unas u otras habilidades cognitivas. Ciertamente en este grupo habría que incluir otras variables no propiamente cognitivas como la personalidad, el conocimiento previo, el interés, etc., y
- la tarea que se debe realizar (memorizar, resolver problemas, clasificar…) a partir del medio.
En definitiva, según Salomon (1979) el proceso y modo de obtención del conocimiento cuando un sujeto interactúa con un medio estaría regulado por los siguientes principios:
- Los medios, en tanto que codifican de manera diferente el conocimiento, exigen distintas habilidades en los sujetos para la decodificación de los mensajes. Consiguientemente se puede sugerir que el tipo de estructuración simbólica utilizada por el medio tenderá a cultivar en los sujetos unos procesos y habilidades cognitivas sobre otras.
- El grado de aprendizaje que se puede obtener del medio estará́ influido por el grado de isomorfirmo entre la codificación que presenta el medio y la codificación interna que realiza el sujeto para procesar dicha información.
- El medio puede tener la potencialidad de suplantar ciertas operaciones cognitivas del sujeto, que en contacto con el medio, tendería a adquirir dichas operaciones.
- Los diferentes modos de simbolizar la información en los medios afectan también a la cantidad de actividad y esfuerzo mental requerida para su decodificación. Esta actividad mental depende de las características individuales de los sujetos y de la tarea que realiza con el medio.
Enseñar y aprender con medios y materiales
Como hemos visto, tradicionalmente los medios y materiales de enseñanza han sido definidos como una colección de artefactos pedagógicos o soportes físicos transmisores del contenido o conocimiento que deben adquirir los alumnos en situaciones concretas de enseñanza. Esta visión reduccionista de los medios como meros artefactos portadores de información ha estado vinculada con teorías conductistas de la enseñanza en las que los medios eran concebidos como estímulos físicos (impresos, audiovisuales, informáticos) para el aprendizaje. Desde esta perspectiva se creía que en la medida que los medios incorporaran un mayor número de elementos gráficos, sonoros e icónicos aumentaría la motivación del alumnado y, en consecuencia, su rendimiento en el aprendizaje. De este modo, se pensaba que los medios de naturaleza audiovisual (ricos en estímulos a través de la vista y el sonido) serian más eficaces para el aprendizaje que otros medios menos cargados de “estímulos” como pueden ser los impresos. Este supuesto con el paso del tiempo quedó totalmente obsoleto.
Los medios no solo permiten acceder a nuevas informaciones o conocimientos, sino que también son los recursos que posibilitan a los alumnos manifestar y expresar sus propias ideas, conocimientos y sentimientos. Para ello, la enseñanza debe ofertar experiencias que vayan más allá de la decodificación de los mensajes, presentando oportunidades para que los niños y niñas utilicen los distintos tipos de medios como recursos de expresión y comunicación. Ello significa que en la educación escolar debe alfabetizarse al alumnado no sólo en el dominio de los códigos y símbolos lingüísticos (es decir, el lenguaje textual), sino también deben desarrollarse procesos de aprendizaje dirigidos a que el alumnado interaccione y sepa expresarse en otros tipos de lenguajes como son los de naturaleza sonora y/o audiovisual.
Citar este texto en formato APA: _______. (2017). WEBSCOLAR. Los Medios y Materiales de Enseñanza. https://www.webscolar.com/los-medios-y-materiales-de-ensenanza. Fecha de consulta: 21 de noviembre de 2024.