La región de Cachemira ha generado desde 1947 un conflicto entre los Estados de la India y Pakistán que disputan la total soberanía sobre este territorio. Es un conflicto que persigue un objetivo territorial, con un trasfondo político, religioso y cultural, y que se ha mostrado indiferente ante el derecho a la autodeterminación del pueblo de Cachemira. Sin embargo las motivaciones que llevan a cada parte a este conflicto son diferentes; Pakistán considera que la región le corresponde por cuestiones religiosas desde el momento de la independencia de Asia central, y a India le interesa la asignación de la región para afirmarse ante el mundo como un estado pluriétnico y secular. El enfrentamiento entre India y Pakistán se ha caracterizado por tener como estrategia la política de disuasión ante la avanzada carrera armamentista nuclear que ambos Estados han desarrollado, política que no ha sido idónea para el acercamiento y resolución del conflicto, que por el contrario ha generado una atmósfera de desconfianza. Algunos autores consideran que los argumentos iniciales de este conflicto se han derrumbado y debilitado para ambos Estados, sin embargo los gobiernos se han negado a moderar sus pretensiones
Características territoriales cuando empezó
La región de Cachemira es casi por entero montañosa y se encuentra en el extremo norte del subcontinente indio, entre la cordillera del Himalaya, al este, y las montañas de Pir Panjal, al oeste. Limita al oeste con Pakistán, al este con China y al norte con Afganistán y China, y tiene una extensión aproximada de 222.000 km². El corazón de la región lo constituye el valle del Cachemira, una zona muy fértil rodeada de montañas y regada por diferentes ríos, siendo los más importantes el Indo y el Jheam.
Cachemira está dividida topográficamente en tres regiones: el valle del río Jhelum, que incluye el valle de Cachemira, en la parte central; las montañas que rodean Jammu, al sur; y las grandes montañas de la cordillera del Karakorum, al norte. El río Indo fluye a través de Cachemira y el río Jhelum nace en la zona noreste del territorio. La región es una zona de paso hacia el subcontinente indio a través de las regiones montañosas que lo rodean e históricamente ha tenido una importancia estratégica clave para los países con los que limita.
Las provincias de mayoría musulmana pasan a constituir Pakistán, que queda dividido en Pakistán Oriental (hoy Bangladesh) y Pakistán Occidental (las provincias de Baluchistán, Sindh, la Frontera del Noroeste y las partes resultantes del denominado “Plan Mountbatten”). La Frontera del Noroeste, o Northwest Frontier, separa Pakistán Occidental de la India a partir de ese momento. La partición trae consigo éxodos y deportaciones masivas entre los dos territorios provocando odio y tensiones entre ambas comunidades, que se cruzan durante el camino a su nueva patria.
En el caso de Cachemira, además, se añade una situación peculiar: una población mayoritariamente musulmana, pero un gobierno hindú. Hari Singh – último maharajá del principado de Jammu y Cachemira –, firma antes de la independencia un acuerdo tanto con India como con Pakistán para ganar tiempo hacia una posible independencia del territorio, pero dos meses después de la firma Pakistán invade las zonas occidentales y del norte de Cachemira pensando que la mayoría religiosa y el fervor de la gente presionarán al maharajá para una anexión a Pakistán. Hari Singh, sin la suficiente capacidad de defensa, se ve obligado a pedir ayuda a la India, que la condiciona a la firma de un tratado de accesión (Instrumento de Accesión), que otorga a la India el control sobre el territorio.
Tras la firma del Instrumento de Accesión, la región queda dividida en tres:
1. El estado indio de Jammu y Cachemira
2. Cachemira Azad, en Pakistán
3. Aksai Chin, bajo control chino
La disputa por la región entronca, pues, con las ideologías que subyacen a la creación de ambos estados: un estado laico en el caso de la India, en el que la presencia de la población musulmana es vista como la prueba de la viabilidad de un país plurirreligioso, y un estado confesional musulmán, en el caso de Pakistán, que considera que la población que profesa esta religión debe pertenecer al Estado pakistaní.
Así, la integración de Cachemira en la India desencadena inmediatamente la primera guerra indo-pakistaní (1947-1948), en la que la potencia india frena el avance de las tropas pakistaníes y, en enero de 1949, solicita la intervención de las Naciones Unidas (NNUU). En su resolución 47/1948, éstas dictan la retirada de las fuerzas armadas pakistaníes y la reducción al mínimo de las tropas indias para poder realizar un referéndum de autodeterminación en la región. Sin embargo, ni India ni Pakistán acatan la resolución, y la guerra se alarga hasta finales de 1949, cuando se firma un alto el fuego. Las NNUU se despliegan entonces en la zona con el objetivo de supervisarlo.
En paralelo a la firma de la intervención de las Naciones Unidas, se establece también una línea de separación entre los dos países. Por su parte, con la promulgación de la Constitución India en 1950, se le concede un estatus especial a la región de Jammu y Cachemira, pues ésta era una de las condiciones establecidas por Hari Singh antes de la firma del Instrumento de Accesión con la intención de perpetuarse en el poder.
Como consecuencia de esta guerra, India asegura su flanco oriental al limitar ahora con Bangladesh, repatría a miles de refugiados bengalíes y demuestra su poderío militar, estableciendo su superioridad en la zona. Pakistán, en cambio, se siente perdedor. Sufre importantes pérdidas territoriales, de población y de recursos económicos al formarse el Estado de Bangladesh.
En 1974, y como consecuencia del difícil equilibrio entre India y Pakistán, la primera crea su primera bomba nuclear. Se inicia así la carrera nuclear entre ambos países y aumenta, todavía más, la gravedad de la cuestión de Cachemira. En 1984, el ejército indio anexiona la región del Glaciar de Siachen, zona de disputa hasta hoy en día entre India y Pakistán, situada entre los territorios del norte y Jammu y Cachemira.
Motivos más importantes
Los cachemires quieren vivir en paz y están hartos de ser utilizados por los Gobiernos de Islamabad y Nueva Delhi para resolver sus diferencias. Yamu y Cachemira son la única región de mayoría musulmana de India. Al hacerse la partición de imperio británico, en 1947, los ingleses habían colocado al frente de esa región a un hindú. Ese mismo año estalló la primera guerra indio-pakistaní. Hubo una segunda y, en el año 2002, las dos superpotencias nucleares estuvieron a punto de enzarzarse en otra; además de la miniguerra de 1999 y de las continuas y sangrientas escaramuzas fronterizas.
Aunque el número de víctimas mortales se ha reducido considerablemente desde hace cinco años, el goteo de muertos es diario. Las conversaciones de paz entre India y Pakistán se concretaron en noviembre de 2003 en una tregua unilateral de las organizaciones armadas que se encuentran al otro lado de la Línea de Control que, si progresan las negociaciones, podría convertirse en la frontera oficial entre los dos Estados. La paz no será fácil.
Citar este texto en formato APA: _______. (2013). WEBSCOLAR. Problema de India y Pakistán por los territorios de Cachemira. https://www.webscolar.com/problema-de-india-y-pakistan-por-los-territorios-de-cachemira. Fecha de consulta: 24 de noviembre de 2024.